Los perfumes han conseguido ese prestigio que no solo se centra en su contenido, si no en su huella. Yo no solo cuenta el olor que destrenden, ahora todo importa. Desde los frascos, que son objeto de coleccionismo extremo, las campañas de lanzamiento merecen un intenso estudio. No hablo solo de una simple gráfica para adornar el estante donde vamos


Hablando de manera armoniosa, lo que más cuesta es crear el universo, el contexto del perfume. Unas simples hormonas crean un cuento, una fabula y sobre todo un carácter.
Hablando de este tema, que me encanta, tengo que hablar de la campaña del perfume
Quizás, Quizás, Quizás, de la maravillosa
marca Loewe.
Confieso que ni he olido este perfume, pero su lanzamiento me maravilló.
Eugenio Recuenco, el creador de la Historia de este perfume mezcla mis dos mundos, la moda y el cine en modo de Cortometraje.
De inteligencia extrema, utiliza el corto (medio del futuro, ojo al dato) para crear esta Historia tan particular. No nos

No hablaré de su contenido porque creo que no se puede transmitir con plenitud. Sólo diré que el entorno que crean, con un decorado y vestuario de vertigo y un humor perspicaz otorgan a la mujer el poder de seducción al estilo Loewe. Y si todo ello lo bañamos en la canción de Nat King Cole que da nombre a esta fragancia, obtenemos todo un universo de armonía y seducción.
Para que disfrutéis de este mundo de decadencia "loewista" os dejo el link.
Espero que os fascine.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=IyD2PReoFYM
Quizás, Quizás, Quizás...